¿Hasta cuando seguiremos soportando que nuestro pueblo aparezca siempre en los primeros lugares de los más endeudados de España?
Todo ello es debido a la mala gestión económica que se viene haciendo desde hace años por parte de los distintos gobiernos en nuestro Ayuntamiento, siendo en estos últimos años cuando ha habido un aumento descomunal, con una deuda municipal que asciende a más de 86 millones de euros y, lo que es peor, que sigue subiendo.
Últimamente se ha puesto toda la carne en el asador en el plan de singularidad, pero, mientras el Estado busca la goma para hacer borrón y cuenta nueva – que será o no- ¿qué está ocurriendo en el día a día en nuestro pueblo?
Sí, ese día a día lleno de quejas de las barbateñas y los barbateños por la situación en la que se encuentra nuestro pueblo y las innumerables deficiencias: en lo relacionado con la limpieza, en la falta de mantenimiento de las instalaciones municipales, en el mal estado de las calles y plazas, en el abandono de los parques y jardines, en el mal tratamiento del arbolado, en la mala gestión de la seguridad ciudadana, en la nefasta gestión de accesibilidad y, así, un largo etcétera.
En definitiva, la sensación que se percibe no es nada esperanzadora